martes, 28 de mayo de 2013

Puterismo

Bienvenidos a la Sociedad de la Des-Información, al espectacular mundo de luces y sombras de la comunicación del siglo XXI. Nos hemos dejado arrastrar por una espiral de corrupción, decadencia y contaminación informativa. Estamos infoxicados por este maremágnum de palabras descontroladas que van y vienen, imágenes que bailan y se desnudan en las pequeñas pantallas, sonidos de bombo y platillo que cierran los informativos. Desde el momento que pagamos por una entrevista, servimos canutazos sacados de contexto y contamos medias-verdades, estamos prostituyendo la información. Y los periodistas (o practicantes, como es mi caso) somos sus chulos. Estamos perfeccionando una nueva vertiente de la profesión: el puterismo.

Nos hemos convertido en unos vendidos. Desconectamos nuestros valores y alquilamos nuestras ideas para mentefacturar productos atractivos, llamativos y bonitos que ayuden a marear los ojos de ese gran monstruo al que llamamos masa. Nos aterroriza cuestionar a una audiencia alimentada con espectáculo, que ha olvidado lo que significa la palabra calidad. Algo de lo que sólo nosotros somos culpables.

Quizá el futuro del periodismo se aclare cuando quiebren los grandes mass media, los dueños de la agenda social de la información, comprada al mejor ofertante. No tienen dinero, no tienen principios, pero nos tienen cogidos por dónde más duele. Pero nosotros no olvidamos que la información es poder, el poder es del dinero y el dinero, no es más que papel. Mientras tanto, mejor consumir mentiras vestidas de ficciones que mentiras vendidas con la etiqueta de actualidad.